San Juan Eudes, sacerdote (Francia 1601- 1680) fiesta litúrgica el 19 de agosto

 

¿Quién fue Juan Eudes?
Un hombre de Dios del siglo XVII, que fue respondiendo, a medida de sus recursos, a los clamores de la misericordia, a las necesidades concretas de su época. Era un sacerdote que sabía leer la acción de Dios incluso en los fracasos, que se dejaba interpelar en serio por los signos de su época y cuyo mayor deseo era hacer eficaz la misericordia. Sus proyectos los realizó, simplemente, porque el Dios misericordioso así lo quería.

     En 1641, funda la Orden de Nuestra Señora de la Caridad, porque en su misiones en los campos y las ciudades, ha descubierto, de una manera concreta, que Dios ama, salva y perdona y se siente llamado a ser personalmente instrumento de ese amor salvador en la pastoral para con la mujer que ejerce la prostitución.

También en el nacimiento de la Congregación de Jesús y María (PP. Eudistas) hay una experiencia de misericordia; le dolían intensamente la Iglesia, las gentes que andaban "como ovejas sin pastor" y se dejó interpelar por el amor de Dios que, en Jesús, viene a "salvar lo que estaba perdido". Si "un alma vale más que mil mundos", es menester que alguien se dedique a tiempo completo a formar a quienes deben salvarla. Y urgido por estas convicciones, se decide a abandonar el Oratorio para fundar su pequeña congregación.

En una carta al primer formador de los nuevos eudistas, el P. Eudes expresaba: "Cuide de formarlos en el Espíritu de Nuestro Señor, que es espíritu de desasimiento y de renuncia a sí mismo; espíritu de sumisión y abandono a la divina voluntad manifestada por el evangelio y por las reglas de la congregación..., espíritu de puro amor a Dios..., de devoción singular a Jesús y María..., de amor a la cruz de Jesús, a la pobreza y el sufrimiento..., de odio y horror a todo pecado..., de caridad fraterna y cordial al prójimo, a los de la congregación, a los pobres..., espíritu de amor, respeto y estima por la iglesia".

Para Juan Eudes, la misericordia era celo por la causa de las personas, un intenso sentimiento de piedad, generosidad y amor que trata de llevar a todos una salvación eficaz, concreta, pero al estilo de Dios. Nos dice: "Tres cosas se requieren para que haya misericordia. La primera es tener compasión de la miseria del otro, pues misericordioso es quien lleva en su corazón las miserias de los miserables. La segunda consiste en tener una voluntad decidida de socorrerlos en sus miserias. Y la tercera es pasar de la voluntad a los hechos".

Juan Eudes joven sacerdote, se va a vivir con los apestados para poderlos atender en su medio; cuando hace la misión en las grandes ciudades establece casas de refugio para los pobres y los enfermos; acomoda a los ancianos y a los que están en mala situación... En Autun, en 1647, hace reparar el hospital de Los Transeúntes y decide la construcción de uno nuevo para los enfermos y para poner allí a los pobres.... Donde no crea hospitales visita siempre los que ya existían... Y cuando había que enfrentarse a los responsables de cualquier sufrimiento injusto, así fueran el rey o la reina, lo hacía con claridad, valentía y misericordia.

San Juan Eudes, ayúdanos a mirar el Corazón del Señor, para que no nos cansemos de ir en busca de los más desvalidos y marginados, para apoyarlos en su dignidad y entregarles la misericordia que viene de Dios.

 

Hna. María Angélica Guzmán
Centro de Espiritualidad del Buen Pastor