TÚ, JESÚS, ERES EL BUEN PASTOR:
Una puerta que se nos abre para ver el cielo.
TU, JESUS, ERES EL BUEN PASTOR:
Una voz que nos habla y nos da paz.
TÚ, JESÚS, ERES EL BUEN PASTOR:
Una mano que nos ayuda a levantarnos.
TÚ, JESÚS, ERES EL BUEN PASTOR:
Unos ojos que nos miran con amor y perdón.
TÚ, JESÚS, ERES EL BUEN PASTOR:
Unos pies que dejan huellas para seguirlas.
TÚ, JESÚS, ERES EL BUEN PASTOR:
Un cayado que nos da seguridad en el camino.