Santa María Eufrasia Pelletier

Una mujer para la innovación, bajo el signo de las revoluciones, en una época en que el proceso revolucionario puso fin a la Monarquía Absoluta en Francia.  La Revolución femenina marca también este período, a favor de la igualdad en derechos y oportunidades para hombres y mujeres. La batalla formal por la igualdad comenzó con la publicación de la obra Una Reivindicación de los Derechos de la Mujer de Mary Wollstonecraft (1792).

Nació en Francia en 1796 y falleció en Angers, Francia en 1868. Ingresó a la Orden de Nuestra Señora de la Caridad fundada por San Juan Eudes un siglo después de su muerte. Se formó en la espiritualidad de su fundador, se nutrió de su mística y su misión. Heredó su amor a las personas heridas por el pecado y el celo por la salvación de las almas, voto específico de esta Orden. ("Una persona vale más que un mundo"). María Eufrasia Pelletier da un nuevo impulso misionero acorde con los tiempos y en 1835 creó la Congregación "Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor". Para Santa María Eufrasia, la imagen del Buen Pastor es la que mejor expresa el amor misericordioso de Dios para con nosotros. "Jesús el Buen Pastor" decía ella a sus Hermanas, "es el verdadero modelo a quien debemos tratar de imitar ... No harán ningún bien ... si no tienen los pensamientos y afectos del Buen Pastor, del que tienen que ser las imágenes vivas".

"Para cumplir la voluntad de Dios yo recorreré el mundo entero" (Santa María Eufrasia)

Breve biografía

En el año 1814, Rosa Virginia Pelletier entró en Nuestra Señora de la Caridad en Tours y le fue dado el nombre de María de Santa Eufrasia. Uniendo su ferviente vida apostólica a una profunda espiritualidad, pasó los primeros años de su vida religiosa al servicio directo de mujeres jóvenes. A los 29 años de edad fue elegida superiora en Tours y dio nuevo impulso a la vida de la comunidad y a su apostolado. Durante ese período en Tours, Hermana María de Santa Eufrasia comprendió que algunas mujeres deseaban consagrar su vida a Dios y formó una comunidad contemplativa dándole como Patrona a Santa María Magdalena. La orientación específica de la comunidad era la oración y la conversión. La Hermana María Eufrasia, que tenía una afinidad espiritual con Santa Teresa de Ávila, fundamentó la vida de la nueva comunidad en la primera regla del Carmelo. Comprendió que a través de su vida de oración y de silencio, las hermanas Contemplativas aportarían también una fecundidad espiritual al apostolado de la comunidad.

A invitación del Obispo Charles Montault, se fundó una casa en Angers en el año 1829 y fue llamada "Buen Pastor", en memoria de una casa con un apostolado similar, que había existido en Angers en el siglo anterior. En 1831 Hermana María Eufrasia fundó una comunidad contemplativa en Angers y sus constituciones fueron aprobadas por el Obispo Montault, en 1834.