Maestro ¿Dónde vives? ... Ven y verás
La pregunta de los discípulos de Juan el Bautista animará nuestra reflexión sobre el don de la Vida Consagrada, como una llamada de seguimiento al Maestro de una manera particular.
El documento sobre la Vida Consagrada, nos dará luces para descubrir el fundamento de quienes han decidido seguir a Jesús en las distintas formas de vida consagrada.
El punto de partida y de llagada en las distintas formas de consagrar la vida es la persona de Jesús. En él se enraíza todo el ser de quien ha decidido seguirle dejando padre, madre, hermanos, amigos e incluso su país, para estar al servicio de la misión de Cristo: El Reino de Dios especialmente en aquellos que son más pobres.
A lo largo de los siglos nunca han faltado hombres y mujeres que, dóciles a la llamada del Padre y a la moción del Espíritu, han elegido este camino de particular seguimiento de Cristo, para dedicarse a El con corazón "indiviso" (1 Co 7, 34).1
La vida consagrada está en el corazón mismo de la Iglesia como elemento decisivo para su misión, no sólo como una ayuda y apoyo, sino que es un don precioso y necesario también para el presente y el futuro del Pueblo de Dios, porque pertenece íntimamente a su vida, a su santidad y a su misión.2
Parafraseando la respuesta de Jesús a los discípulos de Juan el Bautista, el Maestro nos responde: Vengan y vean la riqueza del Espíritu Santo, ha fecundado la Iglesia con hombres y mujeres que han consagrado su vida al Reino de Dios en un estilo de vida monacal, contemplativo, secular, apostólico, eremítico y tanto otros que el amor suscita para el mundo en la Iglesia.
La vida consagrada en el documento de Vita Consecrata, es animada a renovar en el mundo, el tiempo y la historia su triple dimensión: la consagración, la comunión y la misión.
A tantos hombres y mujeres que se han encontrado con el Maestro y le han hecho la pregunta: ¿Dónde vives? Vengan a ver la riqueza de la vida consagrada que se expresa en tantos carismas que quieren ser fieles al Espíritu Santo, anunciando que el Reino de Dios está presente y necesita muchos operarios/as para seguir expandiéndolo.
¡Anímate a Ir y Ver donde vive el Maestro!
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1 Vita Consecrata nº 2
2 Confer. Vita Consecrata nº 3
Hna. Carolina Madariaga
