Antofagasta/Chile.
Como proyecto Mujer, Migrante y Familia e inspirados por Mateo 25,36, “Estuve en la cárcel y viniste a verme”, compartimos el testimonio de una hermana migrante atendiendo a privadas de libertad de nacionalidad extranjera en el operativo de belleza realizado en el Centro Penitenciario Femenino de Antofagasta.
“Para mí fue bastante impactante al entrar en contacto con personas de mi país, pese a sus circunstancias de la vida siguen adelante luchando con ánimo por ellas y sus familias. En lo personal fue muy gratificante brindarles un rato de regaloneo, hacerlas sentir bien y poder escuchar esa frase una y otra vez: ¡gracias, me encantó!
Llegar al lugar fue impactante, era desconocido para mi, encontrarme con mujeres luchadoras, alegres y confiadas en Dios a pesar de sus condenas.
Ha sido una experiencia inolvidable, que me invita a ser más agradecida y generosa en dar lo que este país me ha brindado a través de la Fundación Madre Josefa. Estas vivencias dan sentido humano a nuestra vida, gracias por la oportunidad.
Sentí muy corto el tiempo estuvimos desde las 10 a 14.00hrs. Me encantó el trabajo en equipo que entregamos los compañeros y compañeras de Computación, Peluquería y Manicure, todo resultó muy lindo, me sentía orgullosa de lo que entregamos con tanta dedicación y cariño para ellas”
Misión en Antofagasta.